Circuitos integrados

Morris Chang no es infalible. Nadie lo es.

Durante los últimos días varios medios de comunicación asiáticos están dando visibilidad a un fabricante chino de equipos de litografía prácticamente desconocido que aspira a ser el protagonista de Semicon China.

Las grandes compañías de tecnología que están involucradas en el despliegue de la IA están afrontando inversiones multimillonarias para desarrollar su infraestructura de centros de datos.

Huawei y SMIC trabajan codo con codo y con mucha intensidad desde que arrecian las sanciones de EEUU a China.

NVIDIA lidera el mercado de las GPU para inteligencia artificial con una contundencia impactante, especialmente si nos ceñimos al entrenamiento de los grandes modelos de lenguaje.

Samsung no ha sido capaz de subirse al tren de la IA que actualmente conduce el fabricante de semiconductores taiwanés TSMC sin apenas oposición.

Europa tiene voz en la industria de los circuitos integrados gracias a esta compañía de Países Bajos.

Este hardware es lo más potente que tiene actualmente NVIDIA para IA generativa, aunque según esta compañía también es su propuesta más eficiente desde un punto de vista energético.

China solo se gasta más dinero en la industria de defensa y el pago de los intereses generados por su deuda.

Para el Gobierno de Corea del Sur su industria de los semiconductores tiene un rol estratégico, al igual que las de la producción de paneles OLED o la fabricación de baterías.

A priori podemos intuir que estos eventos cósmicos y los circuitos integrados no tienen nada que ver, pero, curiosamente, sí tienen algo en común.

El retrato de ASML que nos propone el periodista neerlandés Marc Hijink en el libro 'Focus: The ASML Way' es extremadamente minucioso.